Falleció el escritor Eusebio Ruvalcaba

Reporte5.com  La muerte de Eusebio Ruvalcaba (1951-2017), fecundo narrador, dramaturgo, poeta y ensayista, “representa otro golpe que la vida nos da a quienes amamos las letras, pues él tendría que vivir más y producir mucho más”, reflexionó Fernando Macotela.

Macotela se refirió a la lista que la feria coloca cada año en un pendón fúnebre, a manera de reconocimiento por parte de la misma FILMP, las casas editoriales participantes y del público lector asistente.

Y lamentó, al mismo tiempo, no tener el tiempo suficiente como para organizar un homenaje póstumo más adecuado, a la estatura literaria de Ruvalcaba.

Explicó que ese pendón nació a iniciativa suya como deferencia hacia los autores que hubieran muerto en el último año antes de iniciar la feria, pero con el paso del tiempo ya son muchos los autores admirados por el entrevistado, muchos amigos entrañables, “lo cual ya me angustia un poco, pues cada vez son más los amigos que están en esa lista”.

Fernando Macotela es un destacado escritor, promotor y crítico de cine nacido el 6 de octubre de 1938 en Cuautitlán, Estado de México. Estudió en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), de la cual se graduó con la tesis titulada “La industria cinematográfica mexicana. Estudio jurídico y económico.”

Su relación con la cinematografía se ha desarrollado básicamente como promotor y estudioso de la industria nacional, así como en el terreno de la crítica y la producción. Fue miembro del célebre grupo Nuevo Cine (1961), cofundador de la revista «Dicine» (1982) y miembro del jurado del Festival Cinematográfico de Berlín en 1976.

En su calidad de director de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, cuya 38 edición tendrá lugar del 23 de febrero al 6 de marzo, recordó que Eusebio Ruvalcaba estuvo varias veces como invitado, no solamente para presentar libros suyos, también para comentar las obras literarias de algunos otros autores, con glosas siempre atinadas.

Macotela señaló que se ha quedado con la imagen de alguien que unía a su entusiasmo mucha seriedad. “Desde joven fue alegre, pero al mismo tiempo, actuaba con una formalidad absoluta. Me quedo también con su prosa, que en apariencia juvenil, sabe llegar adecuadamente a la conciencia de todos los lectores, sin distingos de edad”, acotó.

El escritor Eusebio Ruvalcaba, quien murió ayer  en la Ciudad de México a causa de una neumonía, a la edad de 65 años, fue colaborador de Casa del Tiempo, Cronopio, El Día, El Financiero, Heterofonía, Jazz, La Mosca en la Pared, La Semana de Bellas Artes, Revista Mexicana de Cultura, Tiempo Libre, y otras publicaciones.

Obtuvo los premios de Cuento El Nacional 1977 por “Antisonata”, Punto de Partida de Teatro 1978 por “Bienvenido, papá”, Nacional Agustín Yáñez para Primera Novela 1991 por “Un hilito de sangre”, Nacional de Cuento San Luis Potosí 1992 por “Jueves Santo” e Internacional de Cuento Charles Bukowski 2004 por “El despojo soy yo”, entre otros.

En su obra publicada sobresalen “¿Nunca te amarraron las manos de chiquito?” (1990), “Cuentos pétreos” (1995), “Amaranta o el corazón de la noche” (2000) y “El sol le hace daño a los ancianos” (2006), en cuento; “Con los oídos abiertos” (2001) y “Chavos: fajen, no estudien” (2003), en ensayo, género con el que ganó una reputación más allá de México.

En novela, obtuvo numerosos reconocimientos; destacan de manera particular “Un hilito de sangre”, “Desde la tersa noche” (1994), “Lo que tú necesitas es tener una bicicleta” (1995), “John Lennon tuvo la culpa” (2004), “Todos tenemos pensamientos asesinos” (2013) y Elogio del demonio (2013) y “Atmósfera de fieras” (1977).

Igualmente, “En la dulce lejanía del cuerpo” (1996), “El argumento de la espada” (1998), “Jugo de luz” (2000), “Poemas de un oficinista” (2001) y “El frágil latido del corazón de un hombre” (2006), en poesía; “Las dulces compañías” (1984), en teatro, y “El niño del paraguas” (1985) y “Me llamo Mozart” (1991), en literatura especialmente para niños. Notimex.