Francia sepulta a sus muertos. Las amenazas de al Qaeda continúan

París, Reporte 5.- Desde París hasta Jerusalén, las familias y los líderes del mundo se reunieron para llorar a los fallecidos en los ataques terroristas de la semana pasada en Francia.

En una ceremonia nacional en París, el presidente francés François Hollande elogió a  los tres policías muertos: Ahmed Merabet, Franck Brinsolaro y Clarissa Jean-Philippe.

A cada uno le fue otorgada la Legión de Honeur (Orden Nacional del Mérito), medalla que fue colocada en cada ataúd.

Merabet era un policía musulmán asesinado al tratar de perseguir a los atacantes de la revista Charlie Hebdo, donde hubo 12 muertos.

Brinsolaro trabajó como oficial de protección para el editor del periódico satírico, Stephane Charbonnier, que también fue asesinado.

Y Jean-Philippe fue asesinada por un hombre armado en los ataques terroristas de la semana pasada. Ella y su pareja estaban respondiendo a un accidente de tráfico cuando fue baleada.

En Jerusalén, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu hizo honores a cuatro rehenes muertos en un ataque en un mercado kosher francés.

Los cuerpos de los cuatro —Philippe Braham, Yohan Cohen, Yoav Hattab y François-Michel Saada— fueron trasladados a Israel y serán enterrados en el cementerio de Givat Shaul de Jerusalén.

Incluso antes de que pudiera enterrar a los muertos de los ataques terroristas de la semana pasada, Francia debe hacer frente a una nueva amenaza de un afiliado a al Qaeda.

La célula en el Magreb Islámico, la rama del norte de África del grupo terrorista, emitió un aviso publicado en los sitios web yihadistas.

«Francia paga el costo de su violencia en los países musulmanes y la violación de su santidad», dijo AQMI en su comunicado.

«Mientras sus soldados ocupen países como Malí y África Central y bombardeen a nuestro pueblo en Siria e Iraq, y mientras sus incapaces medios sigan ofendiendo a nuestro Profeta (Mahoma), Francia seguirá exponiéndose a lo peor y más”.